Existen formas de decorar un apartamento en la que no sabes cómo o por qué, pero de alguna manera todo se ve impecable y con muy buen gusto.
Lograremos este efecto, basados en colores claros como base, personalizando cada habitación con detalles y complementos en contraste.
El color blanco será la base, desde las paredes, el sofá en el salón, las cortinas, la alfombra, las mesas de centro y las mesas auxiliares.
El color azul en diferentes tonos, se proporcionará en los cojines, jarrones, floreros y otros complementos, cuadros grandes y sencillos con base blanca y otros colores pastel, muy sutiles, para que se integre al ambiente creado con el blanco y azul.
Las lámparas de sobremesa o de pedestal, pueden llevar un toque de metal plateado, o combinar tonos de blanco y azul. La estancia tendrá un ambiente vivo y e informal.
El comedor seguirá la misma línea del salón, con una ligera aplicación de madera en la mesa y sillas, las cuales también pueden ser de color blanco con aplicaciones de metal plateado.
La cocina llevará un estilo que resalte en elegancia, las alacenas de tono obscuro, con apliques de metal. El metal también irá en los electrodomésticos, y la encimera de un color blanco. Las losetas en la pared pueden ser en un color neutro como beis, por ejemplo, al igual que el baño, que tendrá una simplicidad elegante con los muebles en color blanco.
El dormitorio, no será diferente, el blanco que predomina y los detalles de azul, aunque aquí se puede aumentar en otros tonos en los cobertores.