El color blanco. Si estás pensando en poner el color blanco en tu casa, este será un gran acierto dónde lo coloques. El blanco nos inspira pureza y limpieza, lo que hace que cualquier espacio parezca más grande y limpio. Para darte un toque mucho más fresco, puedes usar las tonalidades de azul o incluso darle unas pinceladas de tu color favorito con detalles en colores llamativos. El blanco como base, se puede adaptar a cualquier espacio por lo que no tendrás problema a la hora de combinarlo.
El color naranja. Este es uno de los colores más llamativos y aporta calidez y fortaleza al lugar en el que lo coloques. La mayoría de las personas que usan estos colores, los ponen en los lugares en los que la familia se reúne, ya que según la psicología, este color permite que las personas se puedan expresar con mucha más libertad.
El color rosa. Los colores como el rosa, solamente son recomendados para los espacios más femeninos de la casa. Por medio de las tendencias decorativas se pueden crear espacios emocionales que nos llevan a momentos de relajación y sobre todo de enamoramiento.
El color azul. Los colores como el azul, están pensando para los lugares en los que se necesita tranquilidad. Uno de los mejores lugares para los azules claros son el baño o la habitación del bebé y para la habitación, un azul oscuro es la mejor opción.
Cómo ves, los colores de tu casa pueden no solo decir sobre ti, sino cambiar tu estado de ánimo en segundos.